Mancias y ciencias se dan la mano a través de la escritura

Te presentamos a la Grafología, la mancia más científica de todas, ya que mucha gente la considera una ciencia, mientras otros tantos se niegan a dejarla salir del círculo esotérico que la alberga. Gracias a los trazos realizados al escribir, tu personalidad queda al desnudo ante los ojos de quien sabe interpretar los mensajes que sus enigmas encierran.

Como es bien sabido, el estudio de la caligrafía de la persona no es la única mancia que nos revela aspectos de su personalidad y cómo se presentará su futuro en base a su forma de ser. Son muy conocidos como métodos de adivinación la borra del café, la quiromancia, el tarot gratis y las runas, entre muchos otros.

A continuación te presentamos los pilares básicos sobre los cuales se sostiene la grafología.

Bases de la Grafología

• Presión: la fuerza que se ejerce al escribir demuestra la determinación y la energía que se tiene en la vida. También se estudia dónde es que hay más presión, si es al comienzo o al final de la frase. La falta de presión al escribir puede estar manifestando un problema de salud.

 

• Trazos: si el trazo es grueso, denota una personalidad que raya en la obsesión, delatando a una persona que puede llegar a convertirse en una molestia para quienes la rodean y, por ende, se vaticina un futuro más solitario del que su dueño querría. Cuando el trazo es demasiado fino, quiere decir falta de personalidad y decisión. Lo ideal es un trazo intermedio, el cual nos habla de una persona equilibrada y decidida. Las letras redondeadas marcan una tendencia a llevar todo a lo emocional, evitando las voces de la razón, mientras que aquellas que son más angulosas nos presentan a una persona más lógica y racional.

 

• Dirección: las personas que escriben textos cuyas letras se inclinan hacia atrás, muestran que son reticentes al contacto con los otros, prefiriendo sus momentos a solas antes que aquellos en los que salen con amigos a compartir vivencias. Si el trazo se inclina hacia adelante, estamos ante alguien que tiende a abordar a los demás con cierto dejo de agresividad y que es también algo confianzudo. En el caso de los trazos rectos, su personalidad es tan estricta que muchas veces cae en el error de tener una mente cerrada.

 

• Tamaño: mientras que las letras pequeñas nos ponen en frente a una persona que se valora muy poco a sí misma y que cuenta con una autoestima muy por debajo de la media, una caligrafía de letras grandes nos indica a alguien con una fuerte autoestima, incluso un marcado complejo de superioridad.

 

• Tipo de Letra: he aquí una pista de la coherencia que la persona puede tener. Cuando se elige un único tipo de letra, ya sea cursiva o imprenta, denota que la persona es coherente entre el dicho y el hecho. Sin embargo, cuando ambos estilos se fusionan arbitrariamente, estamos ante una persona que no actúa en la forma en que predica, llegando a caer en una contradicción bastante evidente.